El ministro de Desarrollo Social de la Nación, Daniel Arroyo, destacó las medidas que el Gobierno tomó en los últimos meses para reforzar la asistencia a los más postergados y consideró que “comer tiene que ser barato en la Argentina básicamente porque nosotros producimos alimentos”.
En diálogo con Radio Rivadavia, Arroyo contó que reforzaron las partidas alimentarias y enumeró: “En febrero aumentamos un 50% el monto de la tarjeta alimentaria, y ahora un 40% de aumento de asistencia a comedores y merenderos”, algo necesario para mantener su poder de compra porque “evidentemente el precio de los alimentos es el problema más grave” hoy del sector.
En ese marco explicó que previo a la pandemia de coronavirus 8 millones de personas recibían asistencia alimentaria, que luego pasaron a 11 millones en pleno 2020 y ahora son “10 millones de personas que reciben asistencia alimentaria”, un número que se estabilizó.
“Hay más changas, más actividad económica, pero la gente va al comedor igual”, contó, y lo atribuyó en parte al aumento de los alimentos.
“Comer tiene que ser barato en la Argentina básicamente porque nosotros producimos alimentos”, dijo Arroyo en ese contexto y agregó que “la canasta básica tiene que ser accesible”.
También habló de qué pasará si la situación sanitaria se complica. “Si hay más cierre de actividad económica vamos a tomar decisiones económicas para acompañar a los que tengan dificultades. Hoy lo estamos monitoreando todo el tiempo”, aseguró.