El Gobierno avanza en el plan de 60 medidas para reactivar la economía en la pospandemia, tal como el propio Alberto Fernández lo adelantó este viernes, basado en la producción y la generación de empleo genuino y con una visión “federal” que se refleje en un “crecimiento equilibrado” del país.
“El Presidente quiere promover un crecimiento federal. Sabemos que podemos crecer y recuperar PBI, pero que también debemos redistribuirlo equitativamente”, señalaron fuentes oficiales a Télam al ofrecer algunas definiciones sobre el plan que prepara Alberto Fernández para afrontar el 2020 luego de la pandemia. En resumen, se basará en la producción, el empleo y el crecimiento equilibrado.
Este programa incluye iniciativas generadas por el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; y el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, resultado del diálogo político impulsado esta semana con gobernadores, en reuniones que se terminarán de completar en los próximos días.
Las 60 medidas que prepara el Presidente se traducirán en nuevos programas, decretos presidenciales y proyectos de ley que serán enviados al Congreso.
Con este plan, el Gobierno busca comenzar a “desarmar algunas de las políticas de emergencia” impulsadas en los últimos meses, para dar lugar a una nueva etapa de “políticas de recuperación” de los sectores más castigados por la pandemia.
El jefe de Estado busca retomar la agenda de las primeras medidas tomadas por su gestión a partir del 10 de diciembre último, y formuladas en el mensaje ante la Asamblea Legislativa, el 1 de marzo, antes que el 20 de marzo la Organización Mundial de la Salud (OMS) declarara la pandemia.
“Encender a las economías regionales” a través de un reordenamiento territorial y un plan de trabajo consensuado en pos de “un desarrollo más equilibrado” siguen siendo las ideas-fuerza de ese plan, recordaron las fuentes.
Estos lineamientos fueron parte de un documento firmado por el mandatario con gobernadores del Frente de Todos en Rosario, el año pasado, cuando todavía era candidato presidencial de su espacio.
En línea con ese compromiso y, luego de más de cuatro meses de gestionar la urgencia de la pandemia, el Presidente delegó en De Pedro y Cafiero la gestión de esta transición pospandemia con el objetivo de retomar los objetivos de una Argentina federal.
Por eso, la ronda de reuniones que mantienen Cafiero y De Pedro como delegados del Presidente continuará esta semana con Horacio Rodríguez Larreta (CABA), Axel Kicillof (Buenos Aires), Gustavo Sáenz (Salta), Gerardo Morales (Jujuy), Mariano Arcioni (Chubut), Sergio Ziliotto (La Pampa), Sergio Uñac (San Juan), Alicia Kirchner (Santa Cruz) y Raúl Jalil (Catamarca).
La idea de estas reuniones, de las que también participan los ministros de Economía, Martín Guzmán; y de Producción, Matías Kulfas; es escuchar las propuestas de los gobernadores para conocer de primera mano qué sectores pueden empezar a “motorizar la producción y el consumo”, y analizar así los “distintos modelos productivos y las cadenas de valor” posibles en cada región.
Fuentes oficiales indicaron que, en los encuentros, los gobernadores plantean la necesidad de “más y mejor energía” y “obras públicas que mejoren la infraestructura” de cada distrito y permitan potenciar la “matriz productiva de cada provincia”, de acuerdo a sus necesidades.
El plan de las 60 medidas que presentará el Gobierno está diseñado precisamente en las demandas y necesidades planteadas por los distintos gobernadores.
En este marco, las fuentes coincidieron en que la discusión en torno a la redistribución de fondos coparticipables quedará para “más adelante” ante los actuales “niveles de urgencia”, con la convicción de que “primero hay que volver a recaudar para después redefinir la distribución”.
Al anunciar las 60 medidas para encarar la etapa pospandemia, Fernández apuntó al horizonte de “construir un futuro más definido”.
“Estoy seguro que vamos a encontrar un mejor tiempo y estamos cerca: pensamos 60 medidas para plantearle a la sociedad, que tienden a construir un futuro más definido”, fueron las palabras del mandatario, al anunciar la cuarta etapa del Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP), desde la residencia de Olivos.
“La Argentina que se viene nos necesita a todos”, dijo Fernández al identificar a los empresarios y trabajadores como sus “principales aliados”.
Habló también de “la vocación de construir una industria nacional y un contrato social que permita alcanzar ese futuro” y del compromiso de hacerlo en pos de “la industria nacional, los pequeños y medianos empresarios y los trabajadores”.
Este escenario contempla una producción nacional descentralizada y “trabajo coordinado” con el resto de las fuerzas políticas, tal como se hizo durante el avance del coronavirus, a través de diálogos y consensos.
“A la salida de la pandemia, queremos mantener este esquema de trabajo con el resto de las fuerzas políticas”, dijo ayer Fernández.
El esquema sobre el que avanza el Gobierno incluye una nueva etapa del Plan Procrear, complementado con un programa para acceder al suelo, según anunció durante la semana la ministra de Desarrollo Territorial y Hábitat, María Eugenia Bielsa.
El plan, que se implementará en todo el país, “promoverá la generación de lotes con servicios para ampliar el acceso al suelo urbanizado, es decir, se formalizarán relaciones con las provincias y municipios para que se puedan crear bancos de tierra urbanizada y facilitar el acceso a la vivienda”, precisó al respecto.
En sintonía, el último miércoles, el Gobierno anunció la creación de un Gabinete de Tierras para avanzar con el Plan Procrear, fomentar el desarrollo agropecuario y promover nuevos parques industriales.
Según las fuentes oficiales, habrá propuestas que beneficiarán a determinadas provincias o regiones, aunque la letra definitiva de las 60 iniciativas, con eje en la producción y la cuestión social, terminarán de ser revisadas por el Presidente esta semana y presentadas luego en un anuncio cuyo formato aún está pendiente de definiciones.